Doctrina de los Acontecimientos Finales-La Muerte y la Resurrección-Dios,el único que es inmortal-parte 6-

LA MUERTE Y LA RESURRECCION- Advertencia contra el espiritismo. La Biblia nos dice que los muertos descansan INCONSCIENTES en la tumba.

LA NATURALEZA DE LA MUERTE. (continuación)

ADVERTENCIA CONTRA EL ESPIRITISMO.   Ninguno necesita ser engañado por el espiritismo.  La Biblia claramente expone su falsedad.  Como hemos visto, la Biblia nos dice que los muertos nada saben, que descansan inconscientes en la tumba.

La Biblia también prohíbe firmemente cualquier intento de comunicarse con los muertos o el mundo espiritista.  Declara que los que dicen comunicarse con los muertos, como los médiums espiritistas lo hacen en la actualidad, realmente se están comunicando con “espíritus familiares” que son “espíritus  de demonios”.  El Señor dijo que estas actividades eran abominables y que los que las practicarán serían castigados con la muerte (Lev.19:31;  compárese con Deut.18: 10, 11).

Isaías expresó muy bien la necedad del espiritismo.  “Y si os dijeren: Preguntad a los encantadores y a los adivinos, que susurran hablando, responded: ¿No consultará el pueblo a su Dios? ¿Consultará a los muertos por los vivos?  ¡A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a ésto, es porque no les ha amanecido” (Isa. 8: 19, 20).  Así es, solamente las enseñanzas de la Biblia pueden salvaguardar a los cristianos contra este horrible engaño.

MANIFESTACIONES DEL ESPIRITISMO.  La Biblia registra diversas manifestaciones espiritistas–desde los magos del Faraón y los magos, astrólogos y adivinos de Nínive y Babilonia hasta las brujas y médiums de Israel—y los condena a todos. Un ejemplo de ello es la sesión espiritista a que Saúl asistió en Endor la cuál mencionamos al comienzo.

LA ESCRITURA DICE: “Y consultó Saúl a Jehová; pero Jehová no le respondió ni por sueños, ni por Urim, ni por profetas”   (1 Sam.28:6).  Entonces, Dios no tuvo nada que ver con lo que pasó en Endor.  Saúl fue engañado por un demonio que se disfrazó de Samuel, el cuál ya había muerto; Saúl nunca vio al verdadero Samuel.  La bruja vio la forma de un anciano, mientras Saúl sólo entendió o concluyó que se trataba de Samuel.

Si creemos que esa aparición realmente era Samuel, debemos prepararnos para creer en las brujas y brujos, las pitonisas, los adivinos, los espiritistas, o los médiums. Esta sesión no le produjo ninguna esperanza a Saúl, sino profunda depresión. Al día siguiente se suicidó (1 Sam.31:4). 

EL ENGAÑO FINAL.  En el pasado las manifestaciones del espiritismo eran confinadas al reino de lo oculto, pero más recientemente el espiritismo ha tomado apariencia “cristiana” para poder engañar al mundo cristiano.  Al profesar la aceptación de Cristo y la Biblia, el espiritismo ha llegado a ser un enemigo peligroso para los creyentes.  Sus efectos son sutiles y engañosos.  Mediante la influencia del espiritismo “la Biblia está calculada para agradar al corazón irregenerado mientras  que se anula el efecto de sus verdades solemnes y vitales.  Los espiritistas hacen hincapié en el amor como si fuese  atributo de Dios, su reprobación del pecado, las exigencias de su Santa Ley, todo eso lo pierden de vista. Enseñan al pueblo a que mire el Decálogo como si fuera letra muerta.  Fábulas agradables y encantadoras cautivan los sentidos e inducen a los hombres a que rechacen la Biblia como fundamento de su fe”.

Continúa en parte 7