El Bautismo-¿Es cierto que Dios requiere el bautismo?-parte 1-

Por medio del bautismo confesamos nuestra fe en la muerte y resurrección de Jesucristo, y damos testimonio de nuestra muerte al pecado y de nuestro propósito de andar en novedad de vida.  De este modo reconocemos a Cristo como nuestro Señor y Salvador, llegamos a ser su pueblo y somos recibidos como miembros de su iglesia.  El bautismo es un símbolo de nuestra unión con Cristo, del perdón de nuestros pecados y de nuestra recepción del Espíritu Santo. Se realiza por inmersión en agua, y esta íntimamente vinculado con una afirmación de fe en Jesús y con evidencias de arrepentimiento del pecado.  Sigue a la instrucción en las Sagradas Escrituras y a la aceptación de sus enseñanzas.

¿CUAN IMPORTANTE ES EL BAUTISMO? ¿Vale la pena bautizarse?    ¿Es cierto que Dios requiere el bautismo?  La salvación,  ¿depende si somos o no bautizados?

EL EJEMPLO DE JESUS. Cierto día, Jesús salió del taller de carpintería de Nazaret, se despidió de sus familiares, y se dirigió al Jordán donde su primo Juan estaba predicando.  Acercándose a Juan, pidió ser bautizado. Asombrado, el Bautista procuró disuadirlo, diciendo: “Yo necesito ser bautizado por ti ¿y tu vienes a mí? Pero Jesús le respondió: “Deja ahora porque así conviene que cumplamos toda justicia” (Mat.3:13-15).

EL MANDAMIENTO DE JESUS.  Al fin de su ministerio, Cristo mandó a sus discípulos, diciendo: “Por tanto id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles  que guarden todas las cosas que les he mandado” (Mat.28:18-20).

Cristo dejó en claro que El requiere el bautismo de los que desean llegar a ser parte de su iglesia, su reino espiritual. Cristo concluyó su mandamiento relativo al bautismo, con la siguiente promesa solemne: Y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. (Mat.28:20)

EL BAUTISMO Y LA SALVACIÓNCristo enseñó que el que creyere y fuere bautizado será salvo” (Mar.16:16). En la iglesia apostólica, el bautismo seguía automáticamente a la aceptación de Cristo.  Constituía una confirmación de la fe del nuevo creyente (véase Hech.8:12;  16:30-34).

“UN BAUTISMO”  La administración del bautismo en el mundo cristiano varía. Algunos usan la inmersión, es decir, se sumergen; otros, la aspersión o rociamiento; y aún otros, el derramamiento. Característica de la unidad que el Espíritu  produce en la iglesia de Dios es la práctica de un bautismo”.

EL SIGNIFICADO DE LA PALABRA “BAUTIZAR.  La palabra española bautizar viene del verbo griego baptizo, la cuál implica inmersión, ya que se deriva  del verbo bapto, que significa  “sumergir en algo o bajo algo. Cuando el verbo bautizar se refiere al bautismo en agua, implica la idea de inmersión, es decir, el acto de sumergir a una persona bajo el agua.

El Nuevo Testamento no ofrece “ninguna evidencia de que el rociamiento fuese alguna vez una práctica apostólica;  esta práctica fue  una introducción posterior”.

EL BAUTISMO DEL NUEVO TESTAMENTOLos bautismos por agua que presenta el Nuevo Testamento requerían de inmersión.  Juan bautizó a Jesús en el Jordán y después del bautismo Jesús subía  del agua”. (Mar. 1: 9, 10;  Mat.3:16). Cuando Felipe bautizó al etíope descendieron ambos al agua” y luego “subieron del agua” (Hech.8:38, 39).  La evidencia que se ha acumulado proveniente de las escenas pintadas en catacumbas e iglesias, de los mosaicos de pisos, paredes y cielos rasos, de esculturas en relieve y de ilustraciones provenientes de antiguos Nuevos Testamentos, “provee un testimonio abrumador de que la inmersión constituía el modo normal de bautismo en la iglesia cristiana durante los primeros diez a catorce siglos”.